Todos mis compañeros os han ido aportando ideas para San Valentín, unas ideas fantásticas. Yo, por mi parte no he podido hasta ahora presentar la mía y como soy consciente de que voy un poco con retraso os traigo algo muy sencillo de preparar, una receta de brochetas de tomate y queso.
Son un aperitivo perfecto y original para esa cena o comida especial. Si vosotros no sois de los que lo celebran, ni nada de eso, no dejéis de prepararlas aunque sea en otro momento porque llevan muy poquito tiempo y son sorprendentes.
Lava los tomates cherry tipo pera y sécalos. A continuación ve cortándolos al biés, gira una de las mitades dándole forma de corazón e insértalas en el palillo que hará de brocheta.
Corta el queso a cuadrados y clava en cada brocheta, un trocito. Y así, con todas las brochetas. Rocía el conjunto con aceite de oliva virgen extra y espolvorea con orégano picado justo antes de servir.
Degustación
Ya habéis visto que estas brochetas de tomate y queso para San Valentín constituyen una receta sencilla, sana y rápida de hacer por lo que no hay excusas para prepararlas. Si no las vas a consumir directamente aliña justo antes de servir. Espero que os ayuden a hacer en la cena de San Valentín.
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