Hay que reconocer que este año los responsables de la comunicación de las cerezas del Valle del Jerte han hecho una campaña descomunal en cuanto a blogs de cocina se refiere. Una campaña que ha conllevado envío de productos a bloggers, un interesante blog trip y diversos patrocinios. Los usuarios de blogs, como este que escribe, hemos visto cerezas por doquier en infinidad de recetas y al menos en mi casa, han conseguido su propósito: Que consuma cerezas, esa roja pasión del verano.
La fiebre cerecil también ha llegado a Directo al Paladar con posts tan interesantes como el de Esther nos explicó cómo deshuesarlas fácilmente. Y claro, tanto ver cerezas me ha llevado a preguntarme: ¿Qué sabemos sobre este fruto de verano? Y es que, un verano no está completo hasta que no aparecen en los mercados, de hecho, este año, al igual que el verano, han llegado un poco más tarde de lo habitual.
La cereza, también conocida como guinda o picota, es el nombre del fruto de varios árboles del género Prunus. De este tipo de árboles hay muchos aunque no todos producen un fruto comestible o que se comercialice. Las dos especies más utilizadas son el Prunus avium, que produce la cereza propiamente dicha y el Prunus cerasus que produce las guindas. Existe un tercero que es conocido como Prunus Duke y que es el resultado de un cruce híbrido entre los otros dos.
El árbol y la flor
El origen de tan preciado fruto es un árbol llamado cerezo o guindo, que puede alcanzar hasta 30 m de altura. Su tronco es recto y de corteza lisa llena de anillos. Posee un ligero color rojizo y forma una copa amplia y simple y es caducifolio.
Las hojas tienen el borde festoneado o dentado y son ligeramente acuminadas y suelen medir entre 7 y 12 centímetros de largo por 3 a 5 de ancho. Suelen presentarse en el árbol fasciculadas formando ramilletes pequeños.
Las flores aparecen cuando el árbol aún no ha rebrotado, o simultáneamente con las hojas, de abril a mayo. La época de floración en zonas como el Jerte o la Vera constituyen un auténtico espectáculo visual. Son de color blanco y miden entre 2 y 3 cm de diámetro; muestran cinco sépalos y otros tantos pétalos. Los estambres son múltiples. Las flores forman haces de 2 a 6 unidades. En el caso del Prunus avium la polinización se lleva a cabo gracias a insectos.
La madera del cerezo es dura y pesada y es muy apreciada en ebanistería.
El fruto y sus propiedades
La cereza es una fruta rica en vitaminas A, B, C, E, K y PP, en hierro, calcio, magnesio, potasio y azufre. Madura rápidamente y tiene un color que va del rojizo al granate oscuro. Es una fruta tersa que 'cruje' en boca. Tiene un sabor ligeramente ácido con más o menos dulzor en función de la variedad. Es un fruto muy apreciado en repostería tanfresco como en almíbar. El carozo o hueso contiene cianuro de hidrógeno en su interior, por lo que se considera altamente tóxica.
Cereza vs Picota vs Guinda
Son lo mismo y no lo son, me explico, se parecen en que las tres son frutos del Prunus. La diferencias radican que que la guinda es 'hija' del Prunus cerasus y es más ácida y se utiliza más para conservar en almíbar. Las otras dos son fruto del P. avium. La más clara de las diferencias entre la cereza y la picota radica en la ausencia de péndulo en la picota, que se desprende de forma natural cuando cae del árbol. Las cerezas se caen del árbol cuando llegan a su punto optimo de maduración pero llevan el rabito. También, hay diferencias notables en cuanto a textura, sabor y color. La picota es más firme y roja, de carne dura y que cruje al primer mordisco; la cereza es menos oscura y de carne tirando a amarillenta.
En definitiva se trata de distintas variedades de un mismo fruto que tienen distintos nombres. De todos modos os remito al fabuloso post de Pakus sobre Cómo distinguir las cerezas y las picotas.
Recetas con Cerezas en Directo al Paladar
- Clafoutis de cerezas
- Cake de cerezas y queso
- Cerezas al vino con tejas de sésamo
- Crumble de cerezas
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