Cuando llega septiembre y casi todo el mundo se vuelca en la recuperación de un estilo de vida más saludable que le devuelva a unos hábitos sanos, llegan las novedades en este sentido.
Ahora ha sido la cadena alemana Lidl la que ha anunciado cambios en sus tiendas, unas modificaciones que el consumidor final percibirá desde el primer minuto, y que buscan mejorar su estilo de vida.
Esto es: Lild prevé incorporar el polémico etiquetado Nutriscore en todos sus productos, los de su marca, esto es: señalizar con el código de colores semafóricos la idoneidad nutricional de cada uno de los alimentos.
El sistema estará totalmente implantado para todos los productos en 2026, pero es una acción ya que lleva a cabo en sus productos desde el año 2021. Ahora, la mitad de su oferta ya luce este distintivo, según Food Retail.
“Ya tenemos más de 500 artículos de marca propia etiquetados”, explica la empresa en su web, donde precisa que Nutriscore se calcula “según los ingredientes a favorecer en una dieta o a limitar”.
Entre los alimentos a favorecer destaca la presencia de fibra, proteínas, frutas, verduras, legumbres, frutos secos, colza, nuez y aceite de oliva, mientras que remarca que hay que evitar los alimentos que aportan mucha energía (calorías), ácidos grasos saturados, azúcares y sal.
Este etiquetado frontal que va del verde al rojo y de las letras A a la E permite a los consumidores reconocer fácilmente qué opciones son más saludables, un sistema que quiere contribuir a una mejor alimentación entre kla ciudadanía.
Sin embargo, Nutriscore también busca mejorar la composición nutricional de los productos, estimulando a los fabricantes a reducir la presencia de aditivos como sal y azúcar, y a mejorar el perfil nutricional de estos.
Foto | Joana Costa
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