No es que el universo de Harry Potter se haya convertido en el gran referente de la cocina mundial. Sobre todo, cuando tenemos en cuenta que proviene de una gastronomía británica que no es especialmente reputada.
Sin embargo, siempre nos pareció simpática y bastante curiosa la cerveza de mantequilla o butter beer que se servía en los libros y películas de la popular JK Rowling. No sabemos si nuestro amigo mago hacía más magia con la varita que con las cervezas de mantequilla, pero lo que sí sabemos es que la receta está buena.
Puede que parezca un contrasentido meter un componente graso en algo tan ácido y tan en teoría refrescante como la cerveza, esta cerveza de mantequilla queda bastante mejor de lo que parece. Eso si no olvidemos que ahora estamos metiendo alcohol y también estamos metiendo calorías demás en la preparación, así que queda más que claro que es un una receta a la que solo podemos aferrarnos muy de vez en cuando.
También, como es lógico, se puede hacer una receta de cerveza de mantequilla sin alcohol. Lo único que habría que hacer es sustituir una cerveza convencional por una cerveza sin alcohol. En cualquier caso lo que no recomendamos es convertir esta cerveza de mantequilla en un juego de niños ni en dársela a los menores aunque fuera una cerveza sin alcohol.
Calentar la cerveza en un cazo y añadir las especias y dejar infusionar mientras preparamos las yemas. Poner las yemas en un bol y añadir el azúcar y batir hasta blanquear las yemas, que doblen su volumen.
Añadir poco a poco la mezcla de cerveza con especias sobre las yemas sin dejar de remover. Devolver al cazo la mezcla ahora con yemas y azúcar y cocinar cuatro minutos a fuego bajo.
Fuera del fuego añadir la mantequilla y mezclar bien. Colar todo el conjunto por un colador de malla fina. Servir en los vasos dejando 1/5 parte sin servir. Esto que queda, batir enérgicamente con unas varillas o con ayuda de un espumador de café para conseguir una espuma densa y coronar los vasos con esta espuma.
Se sirve templado.
Con qué acompañar la cerveza de mantequilla de Harry Potter
Casi como un ponche o como el típico vino caliente que se toman los mercadillos de Navidad alemanes, esta cerveza de mantequilla es más bien un postre que una cerveza refrescante. Por eso, lo suyo es que apenas nos tomemos una o dos. No mucho más en cualquier caso, se puede acompañar de algunas patatas fritas o incluso hacerla un pelín gastronómica con un desayuno potente, por ejemplo.
En DAP | Cocinar con cerveza: las 49 mejores recetas de Directo al Paladar (para cada estilo de birra)
En DAP | 28 recetas de cócteles fáciles que puedes hacer en casa para un día de fiesta