El pollo al carbón es una de las recetas estrella de la cocina peruana, pero también este tipo de pollos asados se extienden por toda Latinoamérica y España, donde es habitual que el adobado de estas recetas vaya cambiando de zona a zona.
Muy habitual en México también, sobre todo en la zona de Sinaloa, y el pollo al carbón al estilo portugués, la receta que hoy os presentamos sugiere una mezcla de especias que podéis ir alterando al gusto.
La clave del marinado está en que el pollo coja bien los sabores y que luego, si lo hacemos en casa, pueda hacerse fácilmente al grill, a la brasa, a la parrilla, a la barbacoa o en horno normal. Además, podéis hacerlo entero o abierto, o utilizar esta receta de pollo marinado para simplemente embadurnar alitas, muslos de pollo o pechuga de pollo.
Finalmente, parte del encanto del pollo es que esas especias se tuesten o caramelicen ligeramente, dejando ese tono negro en el exterior del pollo que es el origen del nombre y que no hace falta que nos comamos, evidentemente.
Mezclar todas las especias con el zumo de limón y el aceite hasta que quede una pasta homogénea. Masajear el pollo con esa mezcla y reservar en la nevera tapado al menos 24 horas.
Hornear sobre rejilla de horno precalentado a 230 ºC durante 15 o 17 minutos dependiendo del punto elegido del pollo.
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Con qué acompañar el pollo al carbón
Una ensalada y un buen aperitivo nos bastara, aunque en Latinoamérica es muy habitual servirlo con yuca frita, arroz blanco o papas fritas, que también son opciones ideales para redondear la comida con un primero y un segundo.
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