Si te apetece un plato reconfortante y sabroso, este clásico de la cocina francesa, conocido por su suavidad y delicado sabor, es tu receta perfecta para el almuerzo.
Con la llegada del fresco, no hay nada mejor que un plato cálido y delicado como esta blanquette de ternera. Su textura suave y su sabor cremoso la convierten en la opción perfecta para disfrutar de los primeros días otoñales.
Cocinada a fuego lento en una cremosa salsa blanca, la ternera se vuelve tierna y se acompaña de verduras como zanahorias y el puerro, creando una combinación perfecta de sabor y textura. Una receta que, sin duda, llenará tu hogar de aromas acogedores y te invitará a disfrutar de la temporada.
En primer lugar limpiaremos el puerro y lo cortaremos en rodajas. Pelamos las zanahorias y las cortamos también en rodajas. Sofreímos las verduras en una cucharada de aceite de oliva bien caliente y marcamos la carne.
Agregamos el apio, el laurel y un manojo de perejil, cubrimos de agua, agregamos un poco de sal, y ponemos a cocer 50 minutos a fuego suave con la olla tapada. Pasado el tiempo de cocción retiramos la carne y el apio.
Mientras tanto preparamos la salsa, para ello derretimos la mantequilla, agregamos la harina, y cocinamos un par de minutos hasta que adquiera una tonalidad dorada. Agregamos el caldo con las verduras y dejamos cocer 5 minutos al mínimo.
Mezclamos la nata líquida con la yema de huevo en un cuenco y le agregamos un par de cacitos de la salsa para que se integre bien.
Incorporamos esta crema al resto de la salsa, sazonamos al gusto con sal y pimienta y agregamos la carne. Removemos de nuevo, y servimos el blanquette espolvoreado con perejil picado.
Con qué acompañar el blanquette de ternera
Nada mejor para disfrutar de este suave estofado de ternera que un arroz basmati. Simplemente cocido quedará ideal acompañado de la salsa cremosa.
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