A pesar de que me encantan, no suelo hornear pasteles de tipo bundt cake muy a menudo. Las recetas suelen ser demasiado contundentes y salen raciones grandes, que para dos personas puede ser demasiado. Pero de vez en cuando no hace daño, y qué mejor ocasión que su día internacional para darse un capricho como este bundt cake de puré de manzana y limón. Delicioso para desayunos y meriendas de otoño.
En esta receta, que he adaptado de un blog alemán, se utiliza una buena cantidad de puré de manzana para dar jugosidad y aroma. Esto nos ahorra añadir demasiada mantequilla y hace la miga más ligera, pero sin perder esa consistencia de los bundt. El toque de almendra molida ayuda a que no sea tan pesado y combina muy bien con los aromas cítricos, que se añaden también en un sencillo glaseado.
Precalentar el horno a 175ºC y preparar un molde grande de tipo bundt. Engrasar con mantequilla y a continuación espolvorear harina con un tamiz o colador. Dar la vuelta y golpear un poco para que caiga la harina sobrante. Reservar.
Batir con batidora de varillas la mantequilla troceada con el azúcar. Debe quedar esponjoso y de color pálido, por lo menos es conveniente batir bien durante 3-5 minutos a velocidad media. Añadir la vainilla y los huevos, uno a uno, batiendo después de cada adición.
Agregar el puré de manzana, el zumo de medio limón y el yogur, y batir un poco más. En otro recipiente, tamizar la harina con la canela, la sal y la levadura. Añadir la almendra molida y mezclar con unas varillas. Incorporar estos ingredientes secos a la masa, mezclar bien pero con suavidad y llenar el molde.
Procurar que quede la masa bien distribuida, dando unos golpecitos al molde para igualar. Hornear sobre rejilla durante unos 55-60 minutos, vigilando que el horno no se pase cuando lleve unos 50 minutos. Sacar, esperar 10 minutos y desmoldar sobre una rejilla.
Cuando esté totalmente frío se puede decorar. Formar un glaseado ligero, un poco espeso, mezclando azúcar glasé con zumo del otro medio limón. Glasear y añadir crocanti de almendra antes de que se seque, si se desea.
Con qué acompañar el bundt cake
¿Cuándo y cómo degustar un bundt cake como este de puré de manzana y limón? Pues cuando tengamos más ganas de dulce, mejor si es en buena compañía y con tazas humeantes alrededor. Nosotros lo hemos disfrutado en la merienda y también para desayunar, que los días se ven mejor si se arranca de vez en cuando con un capricho.
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