La receta de hoy tiene su origen en México y es ideal para servir en meriendas y desayunos. Vamos a preparar unas gorditas de nata caseras bien doradas y esponjosas, que podréis untar con nata, mermelada, dulce de leche o incluso disfrutarlas sin más.
Las gorditas son unas masas de harina y nata con azúcar, que se cocinan en la plancha y que tienen una altura de unos dos cm, ya que la masa sube con el calor al cocinarlas. Se suelen preparar de un tamaño mediano o pequeño, similar al borde de un vaso, ya que como su nombre indica son gruesas, por lo que sacian bastante.
Se pueden comer solas, cubiertas de otros ingredientes, o incluso abiertas como si fueran panecillos y rellenas con fruta, nata montada o con crema de chocolate y avellanas, por daros algunas ideas, ya que están llenas de posibilidades.
Ponemos la leche, la levadura, una cucharada de azúcar y una cucharada de harina en un bol. Revolvemos suavemente para mezclar los ingredientes y dejamos reposar hasta que la mezcla haya duplicado su tamaño. A continuación colocamos en un bol grande el resto de la harina y mezclamos con el azúcar, dando forma de volcán haciendo un hueco con la mano.
Incorporamos en el centro el huevo y seguidamente la mezcla de levadura que dejamos reposando y la nata. Mezclamos bien y añadimos un pellizco de sal. Vamos amasando los ingredientes hasta integrarlos y formar una masa que no sea pegajosa. Dejamos reposar la masa en el bol cubierto con un paño durante una hora, y volverá a aumentar de tamaño.
Amasamos de nuevo y una vez que se expulse el gas, se extiende la masa sobre la encimera enharinada y se estira con un rodillo, dando un espesor aproximado de 1 cm o algo menos. Cortamos las gorditas con un aro de emplatar o con un vaso y las dejamos en una bandeja de horno para que leven de nuevo durante unos veinte a treinta minutos.
Calentamos una plancha o una sartén antiadherente grande. Cuando la sartén esté caliente, bajamos el fuego y doramos las gorditas en la sartén caliente en tandas de cuatro en cuatro durante cinco minutos por cada lado.
Con qué acompañar las gorditas de nata caseras
Para acompañar las gorditas de nata caseras, deja volar tu imaginación y utiliza nata montada, crema de cacao y avellanas, dulce de leche, mermeladas o rodajas de fresa, para que cada uno pueda montarse un delicioso desayuno o una merienda especial.
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