Hay una nueva moda en Instagram que está revolucionando las cuentas de muchos foodies anglosajones y que viene disfrazada de tortita. Y no es una tortita común, sino la tortita más esponjosa del mundo mundial. Si la primera nos gusta, la segunda nos ha dejado locos. Hemos querido recrear su receta para comprender el éxito de las tortitas soufflé y nos ha bastado un solo bocado para caer rendidos a sus pies.
Las tortitas soufflé son gruesas, esponjosas, casi etéreas y deliciosas. La criatura, que encuentra su origen en los japanese soufflé pancakes, ha conquistado a los EEUU, de costa a costa, y al Reino Unido. Son varios los locales abiertos en los últimos meses que cuentan con un denominador común: largas colas de clientes a la espera de conseguir una mesa en la que disfrutar de la estrella del menú, los soufflé pancakes. Con la consabida foto para Instagram, claro está, que sumar a las más de 45,000 fotos ya publicadas bajo el hashtag #soufflepancake.
Os animamos a preparar las tortitas soufflé en casa, avisando que son un pelín trabajosas. El proceso es más largo de lo normal, pues se cocinan a temperatura muy baja durante muchos minutos, así que hay que ser paciente. Lo ideal es usar aros metálicos en los que cuajar la masa y conseguir la altura que caracteriza a estas tortitas, pero las nuestras están preparadas sin ellos y -creemos- que han quedado la mar de decentes.
Separamos las yemas de las claras. Añadimos 24 gramos de azúcar a las yemas y reservamos los 18 gramos restantes para las claras. Batimos las yemas y el azúcar con unas varillas eléctricas hasta blanquear. Añadimos la harina y la levadura química tamizadas y mezclamos con suavidad. Añadimos la esencia de vainilla y mezclamos de nuevo.
Batimos las claras a punto de nieve, añadiendo el azúcar poco a poco cuando empiecen a formar picos blandos. Incorporamos la mezcla anterior a las claras y mezclamos con movimientos envolventes, de abajo hacia arriba, para que no pierdan el aire incorporado hasta obtener una masa homogénea.
Calentamos una sartén a temperatura baja (3-4 de 9 en placa de inducción) y engrasamos con un poco de mantequilla. Depositamos tres cucharadas de la masa, dejando separación entre ellas, y cubrimos con la tapa. Después de cuatro minutos depositamos otras tres cucharadas de masa encima de cada tortita. Tapamos y esperamos otros cuatro minutos. Volteamos y cocemos un par de minutos por el otro lado. Retiramos de la sartén y reservamos.
Engrasamos la sartén con un poco más de mantequilla y repetimos la operación, depositando otras tres cucharadas de masa del mismo diámetro que las anteriores. Tapamos y esperamos cuatro minutos. Cubrimos cada una de ellas con más masa y con las tres tortitas que hemos reservado, con la parte más cruda hacia abajo. Repasamos los bordes con una espátula, agregando un poco de masa para igualar. Terminamos la cocción con un par de minutos más bajo la tapadera. Servimos inmediatamente.
Con qué acompañar las tortitas soufflé
La mejor manera de disfrutar de estas tortitas soufflé es recién hechas y acompañadas de frutas y un chorrito de sirope de arce. Aunque podemos enriquecerlas con una bola de helado de vainilla, frutos secos, chocolate rallado, dulce de leche, sirope o lo que más nos guste.