Si uno se fija, seguramente habrá visto uno de estos a su alrededor por la calle, en el metro o en una sala de espera. Quienes lo llevan son una especie de zombies del café o dráculas de la cafeína: necesitan, como común denominador, tener café caliente allí adonde vayan.
Un innovador termo, cuyo diseño rinde homenaje a los icónicos termos Stanley, famosos por haber resistido indemnes al incendio de un coche, se han convertido en el accesorio predilecto de los viajeros diarios en el metro.
Con una estética robusta y funcional, este producto ha capturado la atención de cientos de usuarios, consolidándose como un imprescindible para mantener las bebidas a la temperatura ideal durante los desplazamientos.
El diseño, que fusiona la herencia clásica de los termos Stanley con materiales modernos y resistentes, destaca por su durabilidad y practicidad y desde ahora también por un diseño primaveral y con toques retro.
Los fabricantes aseguran que el termo ofrece una excelente conservación tanto para bebidas calientes como frías, lo que lo convierte en la opción perfecta para los ritmos de vida urbanos.
Por todos lados
La popularidad de este modelo se ha disparado en las ciudades, donde se observa de forma abundante entre los viajeros de metro, por ejemplo, pero también en las redes de la mano del postureo.
Además de su atractivo visual, el termo ha ganado reputación por su capacidad para mantener el contenido en óptimas condiciones durante largos periodos en los que no la estemos usando, ideal para llevar (salvo por su aparatoso tamaño).
Esta característica ha sido particularmente valorada por quienes se desplazan diariamente de casa al trabajo o cualquier otra rutina por las calles de las ciudades y buscan un producto fiable que se adapte a sus exigentes rutinas de chute de energía constante.
Este lanzamiento se combina con otras novedades llamativas, como la bandeja ajustable al tapón que permite disfrutar de, por ejemplo, un festín de chuches en forma de versátil plato de silicona. Esta bandeja de aperitivo para los vasos más grandes de Tiger cuesta cinco euros y está disponible en color rosa, estupendo para los días primaverales que se avecinan.
Fotos | Cottonbro studio y Tiger
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